Entrada anticipada:  5€       Taquilla: 7€      Punto de venta: La Casa de Arriba

Al grito de ¡únete al enefenio! la banda de Vigo, Dallasgracias, presentaba el pasado 6 de mayo su segundo trabajo el EP Enefene.  Pol Núñez (voz y guitarra), Martín Verde (guitarra), Nico Ariztía (bajo), Sergio Martínez (batería) y Alex Belerdas (teclados) llamaron nuestra atención cuando les conocimos presentando en directo las canciones de su disco de debut La Increíble Historia de la Chica de Australia (autoeditado 2014) y nos sorprendieron con su propuesta de power pop fresco, de guitarras atrevidas y sucias y persuasivas líneas de bajo, vamos, que reunían todos los componentes para que se activaran nuestras alarmas de “banda a seguir de cerca”.

A principios de este año Dallasgracias comenzaban con la grabación de Enefene en Estereoarte Estudios de Vigo bajo la atenta y experimentada dirección de Luis Antelo. Tres temas son los que componen Enefene pero podrían haber sido más ya que estos chicos tienen material suficiente para grabar un larga duración pero han preferido cuidar cada detalle del disco, tanto el arte como, por supuesto, las canciones para ofrecernos un trabajo hecho con mimo y con un sonido potente, fresco y enérgico. Por cierto, a quien le intrigue el significado del título del disco, pronto lo sabréis

Enefene, sigue la línea marcada por La Increíble Historia de la Chica de Australia, las guitarras enérgicas junto con un bajo rotundo son los que llevan la voz cantante, algo que se percibe claramente en “P1PL”, el tema que abre el EP y que, a mí entender, serviría como nexo de unión entre los dos trabajos mientras que “París” se desmarca derrochando luminosidad a base del teclados que, junto con las guitarras y la batería, evidencian que estamos ante un disco más luminoso que derrocha momentos más que gozosos del mejor power pop.

Y mientras me recreo en el buen sabor que deja “París” llega “El Fin de Los Buenos Días” y entonces, es cuando me encuentro la canción con la que entrar en bucle. ¿Qué tiene este tema que no tengan los demás? condensa todo lo que me gusta de estos chicos, las guitarras, el bajo, de ritmo vertiginoso que va cambiando en el transcurso de la canción, toques de psicodelia e influencias de ese “rock cósmico” . Sin miedo a exagerar, nos encontramos ante lo que se suele definir como temazo.